Efectivamente, esa es la expresión con la que se ha quedado medio planeta al conocer la noticia filtrada por varios portales especializados en nuevas tecnologías que han tenido acceso a documentos confidenciales por los que WhatsApp estaría trabajando para la inminente salida de una nueva actualización que incluirá la geolocalización del usuario en tiempo real, algo que nada más conocerse ha comenzado a generar encendidas discusiones.
Y no es para menos, aún recordamos lo recelosos que éramos a la hora de proporcionar distintos datos personales cuando en distintas aplicaciones o portales nos las solicitaban, bajo la argumenatción de nuestra provacidad.
Ese instinto auténtico de mantener lo único que nos queda como individuos la margen del dominio público, con el paso de los años y la llegada de nuevas tecnologías, está haciendo que desaparezca casi de una manera alienante.
Ya no protestamos si nos piden el número de nuestro carnet de identidad (antes guardado como un tesoro), números de teléfono, etc. En este caso WhatsApp va más allá e incursiona en mantener localizados en todo momento a nuestro interlocutor, algo que provocará reticencias en los primeros momentos pero con el paso del tiempo lo veremos como algo cotidiano.
La salida de la nueva implementación permitirá activarla o no a voluntad, al igual que el doble check azul que indicaba que nuestro interlocutor había recibido y leído nuestro mensaje. Estaremos atentos al anuncio oficial de la medida.
Mas noticias sobre: geolocalización, Whatsapp
Mas noticias sobre: geolocalización, Whatsapp